Este miércoles, un adolescente de 17 años se declaró culpable de haber ayudado a empujar un tronco desde un acantilado, que al caer le provocó la muerte de Victoria Schafer, una mujer de 44 años, que en ese momento estaba tomando fotos en el Parque Estatal Hocking Hills, Ohio.
Jaden Churchheus admitió su responsabilidad como homicidio involuntario, y bajo las condiciones del acuerdo de la declaración de culpabilidad, los fiscales le retiraron los cargos de asesinato y homicidio imprudente, a la vez que devolvieron su caso a la Corte Juvenil.
Schafer, que tenía cuatro hijos, estaba tomando fotos a un grupo de estudiantes en unas escaleras en el parque en septiembre del año pasado, cuando Churchheus y otro adolescente empujaron un tronco de árbol, de unos 180 centímetros de longitud y alrededor de 33 kilogramos, que cayó sobre ella. Los estudiantes llamaron a los servicios de emergencia, pero la mujer falleció en el lugar.
Según las leyes estatales de Ohio, una persona puede ser condenada por su acción voluntaria que llevó a la muerte, aunque el deceso no fuera premeditado.
El juez recomendó que Churchheus pase al menos tres años en un centro de detención juvenil cuando sea sentenciado. El otro adolescente involucrado comparecerá ante la corte el 25 de septiembre.
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