En horas de la madrugada recibimos un mensaje de quien alega, es amiga de Jolenis Soto, expareja de Rosimar Rodriguez, joven desaparecida desde el jueves 17 de septiembre.
Los hechos ocurrieron a eso de las 9:20 de la noche en Sabana Seca, Toa Baja, cuando su familia se encontraba en un compartir.
Según cuenta su tía, Rosimar se encontraba texteando con su ex pareja, quien le había texteado que alegadamente necesitaba ayuda, había recibido una llamada donde solo se le escuchaba llorando y le había pedido la ubicación de su residencia.
Ante esto, su prima le dijo que no fuera y esta le respondió que no iría. Acto seguido, sale de la residencial en espera de alguien y su prima la ve desde arriba frente a un auto del cual se baja un supuesto individuo de tez trigueña, estatura media y delgado le grita: "¿Quien carajo tu eres?" y la empuja hacia la parte trasera del vehículo y luego el se monta como pasajero en el auto/guagua (unas veces dicen auto y luego dicen guagua), color blanco del cual no pudieron identificar marca ni tablilla.
Ante esto, alegadamente Rosimar había utilizado el teléfono de su prima para hablar con su ex, así que esta llamo y nadie respondió. Llamo al de Rosimar y tampoco respondió. Momentos después, ambos teléfonos aparecieron como apagados.
Por el lugar hay varias cámaras de seguridad y hasta el momento las autoridades no han dicho si tienen imágenes del momento y mucho menos han publicado estas para que la ciudadanía pueda compartirlas y dar con el alegado secuestrador.
La familia de la joven asegura que esta se encontraba en una relación con un individuo, misma que su ex pareja, identificada como Jolenis Soto, alegadamente desconocía a pesar de que estos añadieron que Soto le decía que no se embarazara.
Se dice que la familia de Rosimar no estaba de acuerdo con la relación sentimental, pero estas continuaron como amigas con privilegios.
Jolenis alega que en la mañana del jueves, dia de la desaparición, ella se encontraba en una actividad en una cancha donde reside y que al regresar a su casa se percató de que había dejado su teléfono en el lugar antes mencionado. Cuando regresó a buscarlo, ya había mucha gente en la actividad y no encontró su móvil.
Luego de eso, decide ir a la residencia de su abuela para buscar otro teléfono y poder localizar el suyo, mismo que indicaba estar en San Juan.
La noche del jueves se quedó a dormir en la residencia de su abuela.
Jolenis asegura que ha recibido amenazas donde dicen que si Rosimar no aparece, ella y su hija serán asesinadas.
Esta asegura que no tiene nada que ver con el secuestro y que ella no tendría por qué pedir la ubicación de su residencia porque sabe donde vive.
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